Galletas de Nutella

Hacer galletas decoradas tiene muchas cosas buenas, por ejemplo: mi casa huele siempre a galletas, siempre hay galletas recién hechas en casa, puedo desarrollar mi creatividad, es estupendo que la gente aprecie mi trabajo, mis amigos siempre se marchan felices de casa con una galleta en la mano, los hijos de los vecinos te piden una galleta cuando te ven en la escalera...
Que tu marido, después de casi 20 años de matrimonio, te diga que hueles a galletas con cara de "te voy a dar un bocado", pues.... gusta mucho.
Pero hacer galletas tiene, también, su lado menos dulce. Y es la cara de horror que ponen tus hijos cuando les ofreces una galleta decorada. Es normal.
Pero, por suerte, no todas las galletas tienen que ser galletas decoradas.
Esta es una receta de galletas de Nutella. Es la preferida de mi hijo. Es una receta rápidisima de preparar y que no necesita que saques la mantequilla con tiempo ni nada por el estilo.

Ingredientes:
- 1 huevo L
-100 grs. de azúcar
-140 grs. de harina
-250 grs. de Nutella

Ponemos en el bol el huevo y le añadimos el azúcar. Cuando ya está bien mezclado le echamos la harina, de golpe, de una vez. Seguimos mezclando, pero sin trabajarla demasiado, sólamente que esté mezclado. Entonces le añadimos la Nutella, pero tambien sin trabajarlo demasiado. Dejaremos la masa grumosa, que no esté homogénea ni de color ni de textura.

Encendemos el horno, a 190 grados. Preparamos en un plato porciones de masa, como si hiciéramos albóndigas pequeñas. Ponemos papel de horno en una bandeja y vamos poniendo las bolitas. Las iremos aplastando con los dedos, para poder controlar que todas nos queden del mismo grosor, y luego les daremos la vuelta, como si fueran una hoja, para que no nos queden los surcos de los dedos. Esto se puede hacer también con el culo de un vaso, pero se pega la masa y realmente no controlas el grosor.  Tienen que parecer filetes rusos pequeños.

Las galletas no deben de estar demasiado cerca unas de otras para que no se peguen. Cuando ya las tenemos listas metemos la bandeja al horno. 190 grados, 8 minutos.
Estas galletas son "gomosas" por dentro, de las que se pegan a los dientes, pero están muy buenas. Si te gustan  crujientes por fuera aplástalas bastante, y si te gustan menos crujientes no las aplastes demasiado.
Conservación: como todas, en una lata, pero... no te preocupes, que seguro que te duran muy poco!!
Anímate a prepararlas y ya me contarás!!